
Paseando por Sitges me fijé que esta tierna pareja, vestida de azul y blanco, combina perfectamente con el fondo azul del mar y con el blanco de los barcos que navegan por él. Además, el vestido de la señora me evoca el movimiento de las olas y las esponjosas nubes parecen estar danzando junto a sus cabezas, también blancas…